En 2019 Irán puso en muchas dificultades a España en la primera fase, en un torneo que terminó con los de Sergio Scariolo consiguiendo su segundo título mundial. Con la clasificación ya confirmada, la victoria era importante para pasar con un 3-0 a la segunda ronda. Desde el banquillo, el seleccionador pretendía ese doble objetivo de ganar y dar el máximo descanso posible a sus jugadores más castigados. La victoria se consiguió a pesar de que Irán dominó los 10 primeros minutos; y Rudy, que cumplía su partido internacional número 253, no salió a pista pensando en el encuentro decisivo del viernes ante Letonia (11:45 h, la2).
Sergio Scariolo repetía el quinteto inicial del partido inaugural, con Juan Nuñez al frente de las operaciones. España quería aprovechar el juego interior, con Juancho tomando las primeras responsabilidades ofensivas, aunque los asiáticos estaban acertados desde el triple (8-4 mi 3). Una diferencia que aumentó hasta el -9 (15-6) después de la tercera canasta desde 6.75 de los iraníes. Scariolo movió el banquillo buscando la reacción con un quinteto más defensivo. Varios tapones espectaculares y una última canasta de Sergio Llull (el triple sobre la bocina no entró por poco) dejaron el resultado en un igualado 17-16 al final del primer cuarto, un periodo dominado desde el salto inicial por nuestros rivales.
El segundo cuarto comenzó con un parcial de 0-7 y con España por primera vez por delante en el marcador. Garuba dotaba de energía en defensa y Aldama ponía los puntos en ataque, con Llull jugando sus primeros minutos como base. Una canasta del pívot de Azuqueca ponía el 23-27 (min 14) y dos triples consecutivos de Llull y Abrines obligaba al primer tiempo muerto del partido (26-33). Las rotaciones y la mayor profundidad del banquillo español permitían continuar con la intensidad defensiva, con una Irán a la que le costaba más conseguir tiros cómodos. Haddadi, el mayor talento iraní, repartía juego desde el poste alto, pero tenía problemas para parar a Willy Hernangómez en el otro aro. Al descanso se llegó con un 34-43 tranquilizador.
El tercer cuarto comenzó con imprecisiones en el ataque español y con Irán recortando distancias gracias al joven Mohammed Amini. El partido no se rompía, y las canastas se sucedían en las dos pistas del campo. El ambiente del pabellón era un poco frío y eso se notaba en el desarrollo del juego, con una España que no conseguía opciones al contraataque. Otra canasta de Garuba ponía el +10 por primera vez (49-59 min 19). Un triple de Darío Brizuela al final del tercer cuarto ponía el 52-64 y el escolta vasco era el undécimo jugador español en estrenar su casillero de puntos.
La victoria, trabajada, parecía ya asegurada, aunque el partido seguía sin romperse. Irán completaba un gran encuentro, muy sólido y serio, poniendo en dificultades con una defensa ordenada. Juancho Hernangómez se convertía en el máximo anotador del encuentro con 21 puntos, con otra buena actuación de su hermano Willy (16 puntos y 9 rebotes), y un 11+8 para Santi Aldama.
ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB